jueves, 1 de julio de 2010

Inmigración: encuentros renovados


Hasta 1880 se empezó a incentivar la inmigración hacia la Argentina. Las razones eran, entre otras, que Argentina poseía un extenso territorio con poca población. Los primeros inmigrantes fueron españoles e italianos, y en segundo orden franceses e ingleses. La segunda etapa de la inmigración fue a partir del 1880 y el objetivo de su promoción era encontrar mano de obra para producciones agrícolo-ganaderas.

Actualmente podemos ver a una gran cantidad de inmigrantes de no solo países europeos, sino también de países latinoamericanos y asiáticos. En el primer caso, debe observarse que ellos se desempeñan mayormente en el trabajo doméstico, en el rural o en la construcción, en los que las condiciones de contratación son más irregulares e inestables y peor pagas.

En el 2001 el censo realizado en nuestro país registró más de 200.000 inmigrantes bolivianos. La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia afirmó que hay aproximadamente 2.000.000 de sus habitantes residiendo en otros países, y el 73% en la Argentina. A principios del siglo XX se dirigían al noroeste argentino para trabajar en las plantaciones de tabaco y azúcar. En los años ´50 realizaban trabajos relacionados con el cultivo de tomates, pimientos, entre otros. Durante los 20 años siguientes se destacaron en la vendimia y en la ciudad de Buenos Aires por el trabajo hortícola. En Neuquén y en Río Negro hay aproximadamente 50.000 bolivianos, también hay importantes comunidades en Salta, Jujuy y Buenos Aires.

La inmigración proveniente de Paraguay es una de las más numerosas detrás de Italia y España. El censo del 2001 confirmó la residencia de 325.000 paraguayos. 57% de éste número de inmigrantes son mujeres. Las causas de la inmigración paraguaya son, entre otras, la falta de trabajo y desigualdades en su país de origen. Un aspecto a tener en cuenta, es que la cultura guaraní, la más fuerte en Paraguay, es el punto de unión con la de nuestro litoral. Las fronteras no pudieron quebrar la historia: su idioma, música, costumbres y cultivos, como la mandioca, la batata, la calabaza, el zapallo, entre otros constituyen la cultura de una de las comunidades originarias más importantes de nuestras tierras.

El mismo censo de 2001 registró estimadamente 200.000 inmigrantes chilenos, lo cual hace que esta comunidad sea la más grande de chilenos fuera de su país. La concentración mayor de esta comunidad está establecida en las provincias del sur de la Argentina, luego en Buenos Aires y en tercer lugar en la región del Cuyo. Los habitantes de este país comenzaron a emigrar hacia Argentina durante la dictadura de Augusto Pinochet.

China: Según las fuentes del diario Clarín hay aproximadamente 60.000 inmigrantes chinos en nuestro país. La mayoría proveniente de Taiwán y Fujian. Se suelen dedicar al comercio minorista. Este grupo de inmigrantes superó a los japoneses y a los coreanos. Los pobladores de origen chino se encuentran distribuidos en distintas partes del país, y se los conoce por la construcción del “Barrio Chino” en el sector del bajo Belgrano de la ciudad de Buenos Aires. Allí suelen festejar muchas festividades, como por ejemplo la celebración del año nuevo chino.

0 comentarios:

Publicar un comentario